Pongan atención escuincles(as):
¿Es un loco, un excesivo, un exagerado, un solitario arrebatado por un sueño o una pasión sin regreso?...
Es algo más: un hombre que cree (creía?) que la vida puede ser otra cosa, una llama exigente e intensa, un minuto alzado a la mayor posibilidad de vida del cuerpo y la especie; la realidad le parece pálida, sólo su amor flamea con el vigor y el resplandor que él exige a la vida. "X" no da existencia real a nada que esté fuera del amor... apenas si nos enteramos de sus odios o manías, de sus gustos...
Sin ella los días son fantasmas, y la realidad escenario de pesadilla. No se podrá reconciliar con un amor cómodo y gris;...
...quiere la batalla con la realidad (cómo la odia)..., consigo mismo, aún a sabiendas de que habrá irremisiblemente de perderla (¿sí?).
Vagamente sentimos que viene de otro mundo (del propio infierno en realidad), la capital, con una formación moderna y universitaria (pero de verdad) que le permite rechazar o desestimar las normas ultramonotonas de esta ciudad tradicionalista (y eso que ya no tanto); que para no verse obligado a aceptar la realidad y la sociedad como son, sin enfrentarlas trágicamente, las niega y se aísla en su habitación..., las casas de otros marginados...
El amor que sueña es una imposibilidad (¿tan
telenovelesco en serio?)...no le importa, lo sueña doblemente, lo desea con más énfasis, lo imagina con obstinación ensañada: es su acrisolado ideal... En este sentido AD es una víctima de sí mismo, de su propia modernidad... mental, en una realidad tercamente antimoderna en asuntos de moral... y costumbres.
¿Habrá que decir que semejante encontronazo que le exigen sus nervios y sueños inconciliables, le ofrecerá en cambio, así sea con dolores tremendos y la experiencia del yo y la realidad desgarrados, una vida encendida a su mayor intensidad, a su gran altura de sueño, a su vértigo de irrrealidad, destrucción, plenitud y vacío? ¿Que esos días "de riesgo y peligro", como quería Nietzsche, bien valen muchas vidas apaciguadas (y aburridas)? Quizás pasada la explosión juvenil (¿juvenil?) del amor (ja... cursi...) AD "sane" , y acepte lo que la realidad ofrece en la medida tolerada...,
...quizás..., pero siempre sabrá que lo mejor de su vida fueron esos meses "enfermos", delirantes, casi dementes. A veces, como quería Oscar Wilde, es preciso buscar la solución más trágica, así sea una más allá de la tragedia...
Fusilado eso, ya puedo continuar leyendo...